Un maletín de primeros auxilios es un requisito de la Resolución 705 de 2007. Basta con echar un pequeño vistazo a las opciones de maletines e insumos médicos para darnos cuenta que hay un sinfín de posibilidades y alternativas a la hora de adquirir o armar nuestro botiquín de primeros auxilios.
Es fácil para cualquier persona, especialmente aquellas sin conocimientos básicos en la materia, perderse entre términos como “yodopovina” o “máscara de RCP”. Incluso es difícil saber si nos conviene un maletín de primeros auxilios grande o mediano.
Para esclarecer un poco todo este asunto, y garantizar que selecciones el mejor maletín posible para su hogar o su empresa, aquí compartiremos algunos lineamientos básicos a la hora de seleccionar el maletín de primeros auxilios, así como algunas recomendaciones generales que le ayudarán a mantener todos los insumos en óptimas condiciones.
¿Qué tipo de maletín elegir?
La primera elección a la que debemos enfrentarnos cuando elegimos un maletín de primeros auxilios es la del tamaño. Cuando buscamos un maletín para uso doméstico, uno pequeño puede ser suficiente. Sin embargo, para las empresas lo mejor es optar por uno mediano o uno grande… ¿y cómo elegir?
Los maletines medianos suelen recomendarse para empresas de menos de 50 empleados, y contienen todo lo necesario para atender desde pequeñas heridas hasta problemas más serios como quemaduras por ácido. En cuanto a los maletines o botiquines grandes, lo ideal es recurrir a ellos para grupos de más de 50 y menos de 80 personas.
El tamaño también se determina por el tipo de botiquín, un botiquín tipo A requerirá una maleta mediana, pero un botiquín tipo B puede requerir un maletín de primeros auxilios más grande. Y bueno, no todo debe guardarse en el maletín, por ejemplo, la tabla de inmovilización espinal, esta debe estar cerca, pero no dentro del maletín de primeros auxilios.
Otra de las características que podemos seleccionar es el material. Los más populares suelen ser plásticos, pero existen maletines de tela, tipo morral, tipo canguro, y muchos más. Esto debemos elegirlo en base al uso que pensamos darle: los plásticos suelen servir para la mayoría de las situaciones, pero si lo emplearemos en entornos de alta actividad o que requieran de mucha movilidad (eventos deportivos, reuniones al aire libre, etc.) lo mejor es optar por una alternativa más cómoda como un morral o un botiquín tipo canguro.
Los maletines tipo canguro suelen ser muy pequeños pero facilitan el transporte, puede ser una alternativa para los brigadistas, pero no sería el botiquín principal ya que no tendría espacio para todos los insumos.
Tips para mantener el maletín de primeros auxilios
- Hacerlo a la medida: más allá de los elementos más obvios como alcohol, termómetro, guantes y vendas, el contenido de un maletín de primeros auxilios puede diversificarse de acuerdo a todo tipo de necesidades. Lo ideal es tener información sobre posibles alergias o condiciones de los empleados, y así poder prepararse ante cualquier eventualidad.
- Revisarlo periódicamente: los medicamentos, así como ciertos insumos, suelen tener fechas de expiración. Es importante verificar cada cierto tiempo el contenido del maletín de primeros auxilios, para evitar la presencia de artículos vencidos. La recomendación es realizar una revisión mensual.
- Mantenerlo a tope: También se debe reabastecer el maletín de primeros auxilios a medida que se vayan agotando su contenido, y no esperar a que nos quede una venda y dos gasas para comprar insumos.
- Ubicarlo estratégicamente: nuestro maletín de primeros auxilios debe estar en un lugar de fácil acceso para adultos y lejos del alcance de los niños. Se debe evitar ubicarlo en lugares muy húmedos o calurosos y no dejarlo bajo llave.
- Señalizarlo: El maletín de primeros auxilios debe contar con una señalización que permita ubicarlo fácilmente.